Por la calidad de su suelo o por su cercanía al mar algunos distritos serían los más afectados ante un terremoto en Lima. Por ejemplo, algunos tienen suelo arenoso donde no se recomienda construir a la ligera, pues las ondas sísmicas se van a amplificar.
Aquí se ubican Ventanilla, Puente Piedra, Carabayllo, Los Olivos, Callao, San Juan de Lurigancho, Santa Anita, La Molina, Barranco Chorrillos, San Juan de Miraflores, Villa María del Triunfo y Lurín.
Otros tienen arena eólica con agua o rellenos. Son Tablada de Lurín, Villa El Salvador, los acantilados de la Costa Verde, La Molina y Callao.
CONSTRUCCIÓN INFORMAL
El estudio, elaborado por el Ministerio de Vivienda, también toma en cuenta el tipo de vivienda construida; pues un 70% de los inmuebles son informales, es decir, edificados por el dueño con ayuda de un maestro de obra y sin tomar en cuenta ninguna norma técnica. Ello ocurriría en el Rímac, Barrios Altos, El Agustino y Comas, entre otros.
LOS CINCO PRIMEROS
El Centro Peruano Japonés de Investigación Sísmica y Mitigación de Desastres (Cismid) de la UNI señala que son cinco los distritos críticos: Villa El Salvador, San Juan de Miraflores, Comas, Carabayllo y San Juan de Lurigancho.
Pero ante un terremoto de 7,8 grados no solo esas zonas se verían afectadas. El Cismid calcula que el 60% de casas en Lima sufrirían daños estructurales. “De estos, el 20% colapsaría por ser antiguas y autoconstruidas”, señaló el ingeniero Carlos Zavala.
Lima acumula energía hace 270 años, por lo que se espera un terremoto superior a los 8,5 grados.