Por Ana Briceño.- Luego de tres años de investigaciones, el exalcalde de San Juan de Lurigancho Carlos Burgos Horna se sentará hoy en el banquillo de los acusados para escuchar su sentencia. De comprobarse que se enriqueció de manera ilícita y lavó dinero ilegal -como lo sostiene la fiscalía-, el ex burgomaestre recibiría una pena de 20 años. El período que abarca la indagación a Burgos es del 2007 al 2013.
En el 2014 intentó ser alcalde por tercera vez, pero su candidatura fue tachada por el Jurado Nacional de Elecciones, al confirmarse que había terminado la secundaria el 2013 y no en 1982, como consignó en su hoja de vida. Sin embargo, esa mentira sería un aprieto menor frente a la acusación que ahora pesa en su contra. «El acusado se valió del cargo de alcalde para abusar y obtener grandes sumas de dinero, que no se justifican con sus ingresos percibidos», es una de las conclusiones de la Fiscalía Anticorrupción, en la acusación formal contra Burgos, afiliado al partido Solidaridad Nacional, que encabeza el alcalde de Lima, Luis Castañeda.
–Desbalances-
Los peritajes contables y financieros realizados por la fiscalía concluyeron que entre el 2007 y 2013, el desbalance patrimonial de Burgos fue S/8’445.210,01 ,es decir, sus ingresos fueron inferiores a sus egresos. Según la acusación fiscal, a la que tuvo acceso este Diario, el 2008 el desbalance patrimonial de Burgos fue de S/1’015.930,28. Sus ingresos ese año fueron S/l 10 mil pero sus egresos llegaron a S/ 1’126.891,58. Los peritajes arrojaron que destinó S/95 mil para constituir la empresa C&D Car y prestó -en su calidad de socio mayoritario-S/819 mil a dos de sus compañías. A medida que pasaban los años, su desbalance fue aumentado sin posibilidad de justificarlo.
«Destinaba dinero para supuestos préstamos a favor de sus empresas y para compras de bienes como terrenos en Jicamarca a precios subvalorados. Las empresas fueron pura facha-da para lavar dinero ilícito», sostuvo una fuente de la Procuraduría Anticorrupción. -Amistades peligrosas- En esta investigación también están incluidos Jessica Oviedo, expareja de Burgos, a quien él nombró asesora cambiando los requisitos profesionales para ese puesto -según la fiscalía-, y su amigo David Nestares, exteniente alcalde.
«Entre los tres existió una relación de suma confianza que les permitió adquirir bienes, constituir, administrar y dirigir empresas. Y, a través de contratos simulados, transferir los bienes y los títulos de las empresas a familiares y amigos», se lee en la acusación fiscal. Para el Ministerio Público Oviedo y Nestares también presentan desbalance patrimonial. Este Diario intentó durante varios días comunicarse con los tres, pero no obtuvo respuesta (El Comercio).
229 mil soles es el desbalance patrimonial que registró Jéssica Oviedo, ex pareja de Burgos, entre el 2007 y 2008.
“[Burgos] resultaría ser autor de un concurso real heterogéneo de delitos”. Walter Delgado Fiscal a cargo del caso [durante una audiencia]